martes, 19 de febrero de 2019

¿Por qué escribí Fragmentos de una Sedición?

Esta historia jamás se la he contado a nadie, así que si estás leyendo, ve por unas palomitas, ponte tu pijama favorita y prepárate para conocer una anécdota que tiene ya 12 años de antigua. 

Fragmentos de una Sedición es el nombre de la primer novela que escribí en mi vida.


Corría el año 2006 y yo tenía 15 años. Fue en ese entonces cuando leí en alguna página de la red la forma en que Stephen King había dado inicio a su más grande saga de libros: La Torre Oscura. El primer tomo de esta saga, llamado El Pistolero iniciaba con nada más que una genial frase; una frase breve pero potente, y la cual englobaba toda la aventura que esperaba al lector si se adentraba en esa historia. 

La frase era esta: 
  • "El hombre de negro huía a través del desierto y el pistolero iba en pos de él."

Una simple frase, una enérgica y feroz frase era todo lo que se necesitaba para poder iniciar una novela. 

En ese entonces, yo sólo tenía una vaga noción de que quería ser escritor, aunque aún no me había parado a pensar con detenimiento en ello. Pero al leer ese artículo, al saber la historia de esa frase y todo el Universo literario que se había desprendido de ella, fue como una revelación para mí. 

Así que en mi idealismo e ingenuidad adolescente, me lancé a escribir mi propia frase poderosa, la frase que sería el pistoletazo de salida para la novela que cambiaría vidas, la novela que cambiaría el rumbo de la historia de la palabra escrita.

Así que me senté y escribí una frase super original para mi yo de ese entonces, una frase inicial que iba más o menos así: 
  • "La mujer de negro corría a través del edificio abandonado y el cazador iba tras ella."

Como pueden ver, la originalidad no había sido el fuerte del inicio de esa primera novela. Pero eso no importaba, yo comencé a escribir y escribir, una palabra tras otra, frase tras fase, día tras día. La marea de palabras e historias salían en una sucesión inaudita. 

Cuando llevaba unas 20 o 25 páginas de esa historia, me di cuenta que el inicio que había escrito a modo de prólogo, el de la mujer de negro, ya no me servía, ya no se adaptaba a la historia que había comenzado a crear

Así que al final, aunque había desechado esa frase horrorosa junto con las primeras páginas del libro, el hecho de haberme sentado a escribir de manera seria, me había servido para inconscientemente crear una historia propia con mi sello y con mi propio estilo.

Así que ya tenía un nuevo prólogo (el cual regalaré a las personas que se suscriban dejando su mail en los comentarios) y el primer capítulo de una historia nueva y las ideas brotaban incesantemente de mi imaginación, había muchísimas historias por contar. Y todo se lo debía a esa frase inicial. 

Así que aprendí que no necesitamos la mejor idea para empezar una novela o un cuento, más que una buena idea o sentarnos a esperar por la "inspiración", lo único que necesitamos hacer es sentarnos a escribir y empezar a practicar, para que las ideas comiencen a fluir por sí solas, aunque todo lo que escribamos en un principio sea una absoluta basura. 

¿De qué va Fragmentos de una Sedición?     

Bueno, imagino que ahora tendrán por lo menos un poco de curiosidad por saber de qué trata esta novela que casi nadie conoce (estuvo publicada en una plataforma digital el tiempo suficiente para releer pedazos de ella y darme cuenta de lo mal que escribía en ese entonces).

Así que ahora les contaré un poco sobre ella. 

Ese mismo año, 2006, salió una de mis series favoritas: Héroes. 

El planteamiento de esta seria era todo lo que yo había querido siempre en relación a los superpoderes. Trataba sobre gente normal y corriente que no buscaba convertirse en superheroes, simplemente eran personas como cualquiera de nosotros a quien la evolución de pronto les daba tal o cual poder. Pero no había capas, ni supervillanos, ni identidades secretas, sólo gente normal queriendo pasar desapercibida. Todo eso me volvía loco y la serie me encantó. 

Pero habían cosas en que la serie no había cumplido con mis expectativas. Por ejemplo, se suponía que esa clase de personas eran perseguidos por una organización secreta, pero ese punto no terminaba de cuajar, y nunca veías enfrentamientos abiertos, al estilo disturbio de los noticiarios, entre las personas con poderes y el sistema. La organización también de pronto iba perdiendo fuerza en la trama de la historia, suplantada por el psicópata obsesionado por robar poderes de otras personas.

Así que con mi novela decidí reparar eso. También sería sobre gente normal con superpoderes, pero aquí el tema central sería la persecución inevitable que este tipo de personas sufrirían a manos del gobierno y la lucha que estos emprenderían para intentar rebelarse. 

También quise imprimirle mi sello de identidad con algo que yo nunca había visto en las películas o cómics de superhéroes: los cuerpos de las personas no siempre estaban preparados para soportar la fuerza de un superpoder, y los personajes podían lastimarse a sí mismos al momento de utilizar sus habilidades. 

Por ejemplo, aunque un hombre tenía una increíble fuerza y podía dar largos saltos, tenía que cuidarse de no romperse una pierna al caer nuevamente en el suelo, o un hombre que soltaba electricidad por el cuerpo, recibía también cortes en la piel cada que la electricidad comenzaba a recorrerlo. Y el último caso que se me viene a la memoria es el de una chica que puede ver el futuro, pero las visiones le traen migraña, sangrado de nariz y por lo que le comenta su mamá (quien comparte su poder), efectos muy negativos para la salud a largo plazo.

Aunque la historia tiene mucho potencial, y es la novela más extensa que he escrito, con la experiencia que los años traen, me di cuenta que está terriblemente mal escrita (tenía 16 años, qué otra cosa esperaban) más de la mitad de la novela es material que sobra y que podría recortarse sin problema alguno. Así que aunque me siento muy orgulloso de ella ya que es mi obra más ambiciosa a nivel narrativo así como la que más personajes tiene, yo sé que hasta que no la reescriba por completo, no es un material digno de ser publicado en Amazon. 

La terminé de escribir en 2009 y le tengo un lugar muy especial en mi corazón, si no fuera por ella y por todo lo que me enseñó sobre la disciplina a la hora de escribir, las cuatro novelas que ahora están publicadas en Amazon, simplemente no existirían.



Esta entrada pertenece al reto de los 28 días. Da clic aquí para conocer más sobre este reto para escritores.

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5 comentarios:

  1. diazmiriam231@gmail.com :) excelente escrito

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  2. Nunca decepciona tu narrativa 😶

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    Respuestas
    1. Te agradezco mucho tus palabras! Me alegra mucho que te guste mi forma de escribir!
      Te mando un saludo!

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  3. ¡Wow!sin duda fueron aprendizajes, que te ayudaron a mejorar. Siempre serán de gran valor, pues fueron abriendo tu camino, como escritor. Saludos Jorge.

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