Antes que nada, yo no soy un vendedor nato. Es más, ni siquiera me considero a mi mismo como un vendedor en lo absoluto. Así que si entraste en este artículo esperando encontrar alguna fórmula mágica para vender 100 libros por Internet de la noche a la mañana, lamento desilusionarte.
El llegar a vender estos primeros libros (dentro de estos 100 libros incluyo los ebooks así como los libros físicos), me tomó la módica cantidad de 10 meses. Así es, empecé a tomarme esto de Amazon en serio en Octubre del año pasado, 2018, y fue hasta Agosto de 2019, cuando finalmente llegué a vender 110 libros y se leyeron 19 mil páginas de los mismos a través del sistema Kindle Unlimited, el cuál es, como yo mismo lo describo en este artículo, un Netflix, pero de libros.
Yo sé que para los escritores consagrados y famosos o quienes ya viven de la escritura, estos números son irrisorios, quizá 100 libros es lo que venden ellos cualquier día normal antes de tomar su café por la mañana, cuando aún están en pijama.
Pero este artículo lo escribo con el afán de ayudar a quienes aún no se han animado a publicar sus novelas en amazon, o a quienes como yo, están dando apenas sus primeros pasos en este fantástico y caótico mundo de la auto-publicación.
Quiero mostrar que, aunque sí es un camino arduo y lleno de trabajo, no es tan complicado como se suele pensar. Como todas las cosas que valen la pena en la vida, el llegar a vivir de la escritura requiere de constancia, esfuerzo, y de tener siempre claras tus metas, y nunca perder de vista tus objetivos a corto y largo plazo.
Primer Paso: tener clara tu meta.
Cuando recién me lancé a la aventura de ser escritor, tenía claro lo que quería lograr. Mi primera meta a mediano plazo era lograr que la gente me leyera, y de esta manera que fueran los mismos lectores, y no el empleado de alguna editorial, quienes me dijeran si mi material era lo suficientemente ameno como para gustar y ser leído. Esto lo conseguí durante un año en plataformas de lectura como litnet, wattpad o sweek.
Una vez que el mismo mercado me dijo que mis libros sí eran un material de lectura con el que la gente disfrutaba de pasar el tiempo, fue entonces el momento de cambiar la meta, o más bien, de actualizarla.
Ahora era momento de saber si mis libros sólo eran amenos, o si eran algo por lo que la gente estaría dispuesta a pagar. Era hora de saber si el mundo me consideraría un escritor y pondrían la suficiente confianza en mí y en mis libros como para comprarlos. Siempre he pensado que no hay forma alguna de agradecer a esas personas que invierten 1 o 2 o 3 o 10 dólares en alguna de mis historias, simplemente es un gesto que valoro tanto, que carezco de las palabras suficientes a la hora de expresar mi gratitud ante el voto de confianza que ponen en mí. Por tanto, siempre procuro mejorar mi calidad, mi prosa, mis técnicas, y tratar de entregarles a esas personas una historia mejor que la que escribí anteriormente.
¿Y qué creen? En cuanto comencé a divulgar mis obras a través de Facebook, la gente, los lectores lentamente fueron llegando. Nunca he vendido cantidades exorbitantes de libros en Amazon, pero el hecho de que mes con mes haya gente interesada por algún libro, es lo que me motiva a seguir mejorando y seguir esforzándome día a día.
Segundo Paso: Es hora de subir la calidad. Es hora de entregar un producto profesional a la gente que confía en ti.
Bien, llegados a este punto, en el que la gente empieza a pagar por tus libros, te das cuenta que tienes una enorme responsabilidad sobre tus hombros. Así como a ti no te gustaría leer un libro de mala calidad, a los lectores de amazon tampoco, entonces era momento de pagar a un corrector profesional para que revisara mis libro de Lucifer, Príncipe en el Exilio, y Ciudad Violenta, Una Historia de Zombies y los dejara sin errores gramaticales, ortográficos y con una sintáxis perfecta. Era lo menos que podía hacer para mis lectores.
Durante este periodo, la promoción de mis libros estuvo en una pausa, me centré más en generar contenido diario de calidad en la página de Facebook de Espada Literaria, ya que no me sentía bien de seguir promocionando libros que aún no estaban corregidos profesionalmente.
Finalmente los libros estuvieron corregidos, y pude volver a la normalidad y hacer publicidad con los libros.
Tercer paso: Aprender y desarrollar nuevas habilidades. Pensar fuera de la caja.
Para vender libros en amazon no necesitas ser un vendedor nato, pero lo que sí necesitas, es esforzarte por brindar un producto (libro) de la mayor calidad posible, un producto que sea el tipo de libro que tú mismo quisieras leer. Para llegar a vender estos primeros 100 libros, he tenido que recurrir a muchas estrategias de publicidad, como las que cuento en este artículo, y he tenido que aprender sobre la marcha muchas disciplinas que tiempo antes ni me hubiera planteado siquiera manejar, tales como el e-mail marketing, facebook ads, el marketing de contenidos y SEO.
También debes estar dispuesto a leer mucha crítica negativa (afortunadamente los comentarios positivos son abismalmente mayores) y a no dejar que esta te baje la autoestima o te haga rendirte. Pero siempre debes de prestarle atención, y tratar de sacarle provecho en tu propio beneficio. A veces, aunque te digan cosas malas, o las acompañen de insultos, puede que esa opinión mal expresada esté bien fundamentada. Entonces, no te dejes influenciar por la crítica, pero sí analiza eso que la gente critica y ve si hay algo que puedas hacer para mejorar, tanto en tus libros así como en tu publicidad que pudiera evitar esas críticas.
Conclusiones
Por tanto, no basta ser un buen escritor. Puedes tener el mejor libro del mundo, pero si no tienes idea de cómo darlo a conocer, la gente simplemente no sabrá que existe, y nadie lo leerá, y si nadie lo lee, simplemente el libro pierde la máxima función para la cual fue creado. Tienes que estar abierto a nuevas experiencias, a nuevos conocimientos, a hacerle preguntas a gente más sabia que tú y que ya han recorrido este camino antes que tú. Debes ser capaz de pensar en maneras en que no lo habías hecho antes, de aprender cosas nuevas aunque no sean del todo de tu agrado, debes estar dispuesto a experimentar cosas nuevas o experimentar lo mismo, pero desde múltiples puntos de vista.
Y sobre todo, debes tener la humildad suficiente y sobre todo estar siempre eternamente agradecido con aquella persona que desinteresadamente, y muchas veces sin conocerte en persona, invierte un peso, un dólar o un euro en algo que tú has creado.
Seguir escribiendo historias que nos transporten a otros mundos es la única forma que tengo de decirles a todos ustedes: GRACIAS.
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Les dejo la portada del libro de regalo.
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Casi derramo una lágrima. ¡Felicidades por tus 100! En hora buena, que nunca desfallezca tu ánimo por relatar una historia con ese estilo que te caracteriza, saludos.
ResponderEliminarAmigo, te agradezco enormemente que hayas dejado tu comentario aquí!
EliminarY además me sorprendió muchísimo ya que esta entrada aún no la comparto en ninguna parte, jaja.
Te mando un saludo y en cualquier cosa que pueda ayudar, aquí estamos si necesitas consejo o tienes dudas sobre amazon.